miércoles, 11 de diciembre de 2013

Nostalgias imperiales.

Ésta paz es un conformismo repleto de ansiedad. Quiero cambiar de rumbo mirando hacia la nostalgia, pero eso significaría navegar en un barco hundido. ¿Es posible que tanta monotonía me haya llevado a seguir su mismo destino? Quizás sea por eso que, en momentos así, pienso que decir que sí a todas las oportunidades es un entierro prematuro, de la misma manera que hay luces que es mejor no encender tan sólo por el dolor de ojos que espera después, justo detrás del deseo cumplido en la calle de la tentación. Pero es que hay quien nace estrella y quien nace satélite, y cuando estás fuera de lugar cuesta permanecer allí por mucho tiempo. Por eso, raras noches se puede ver al Sol y pocos días se puede ver a la Luna.
Pertenecemos al recuerdo que nos llora justo antes de que muera para que no le olvidemos.