Me encuentro
estancada en una brillante mirada,
devorada por una estrambótica sonrisa,
frivolizada por un cálido tacto,
maldecida por un pícaro aroma
y destinada a escuchar un eterno latido.
Estoy llena
de emociones vacías,
de palabras mudas,
de infiernos fríos,
de bálsamos amargos,
de estridentes sonidos,
de momentos muertos
y de recuerdos vivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario