Hoy ha sido un día intenso. Puede que la razón sea que me
haya despertado a las 8 y media y aún a las 3 y media de la mañana esté
despierta. Siempre me he considerado nocturna…
Ésta es la explicación superficial sobre la intensidad del
día pero no convence, es una porquería.
El gran día ha sido intenso porque han surgido sorpresas y
recuerdos inesperados.
A la mañana, la primera amiga que hice durante la
universidad se ha despedido de mi con un "Te quiero". Pocas veces suenan sinceros
porque pocas veces nos atrevemos a decirlos de verdad. Realmente hacen ver el
mundo de otra manera...
No quería soltar a mi amiga en ese abrazo, de hecho me ha
costado. No soy cariñosa pero hay personas que me ganan y que sin quererlo se
hacen de querer.
De lo más gratificante también ha sido ver cómo ésta chica
se tragaba su orgullo y se reconciliaba mediante un abrazo de despedida con
otra gran amiga. Estas cosas son las que me gustan de la humanidad, dignas de
recibir tal nombre.
La mañana ha despertado con alegría y entusiasmo por estos sucesos.
La hora de comer la he pasado pensando en las personas que
no tienen esta posibilidad. He imaginado el mundo sin recursos alimenticios y
he reflexionado sobre las cosas diarias que pasan desapercibidas como si de
algo innecesario se tratase siendo, precisamente, cosas básicas y esenciales de
las que algunos desdichados carecen. Es horrible la sensación de no poder hacer
nada, pero espero en un futuro tener el suficiente control sobre mí misma como
para ayudar a provocar un cambio favorable en esta dirección.
El día seguía adelante guiado por un tren. Así es, viajo en tren durante dos horas en
las que siempre me siento segura, valiente y feliz. Parece que el tiempo se
para y que no hay decisiones que tomar. El tren marca una dirección fija y
simplemente me dejo llevar por sus paisajes y sonidos. Durante el viaje paso
por distintos pueblos (maravillosos todos) siguiendo el camino que marca el río, paso túneles y de
vez en cuando se puede ver el mar. Simplemente me pongo mi música y me dejo
llevar por los paisajes. En el río siempre veo patos y otras aves. Hoy he visto
un cisne… curiosísimo y sorprendente. Una genialidad de la naturaleza ver el
paisaje gris en contraste con sus plumas blancas y su figura delicada.
Lo que me sorprende es que la gente del tren no se fija en
el paisaje y yo sonrío felizmente mientras veo caras serias. Me he propuesto
cambiar esas caras largas.
Luego he estado con mis amigos riéndonos unos de otros,
poniéndonos al día y tomando té verde. En mi vida había probado eso pero me apetecía
probar algo nuevo por razones desconocidas. El olor era genial y relajaba. Su
aroma era una mezcla entre castañas asadas y el bosque de mi pueblo, sobretodo
el olor de cuando llueve mezclado con el de las setas. Podéis haceros una idea,
¿No? Totalmente invernal, como a mí me gusta el ambiente…
Lo sorprendente ha sido que al probarlo esperaba otro sabor.
Recuerdo cuando de pequeña iba con mi primo al monte de arriba de mi casa y
cogíamos tomillo para que mi abuela nos lo hiciera como infusión. El sabor del
tomillo era como su olor, y viceversa. Eso era lo que esperaba con el té verde
pero no sabía como olía, tenía un sabor más ligero y decepcionante. Pero me ha
gustado esa sensación y recordar parte de mi infancia gracias a un aroma, un
sabor y sobretodo a una decisión inesperada por mi parte. Hay que ver lo que te
puede aportar un té verde…
Al final me he quedado sola con una amiga y hemos ido a otro
bar para hablar, y en mi caso tomarme un batido de chocolate con nata y
chocolatinas por encima. Esa es mi dieta para la famosa operación biquini, me
voy a cuidar a base de placeres.
El caso es que hemos estado hablando de cosas bastante
personales y hemos compartido sensaciones realmente agradables. Es genial poder
ayudar a alguien escuchando y aportando apoyo con palabras.
A la salida llovía. Eso ha sido otro punto a favor para el
día. Os aconsejaría que alguna vez os olvidéis del paraguas y caminéis
tranquilamente mientras la lluvia acaricia vuestro rostro. Es un pequeño placer
que no hace daño a nadie y que puede que un día echemos de menos. El agua es
vida y al mojarte te sientes vivo…
Luego he cogido el autobús de regreso a casa. Los cristales
estaban empañados y al fijarme en la gente he vuelto a ver caras serias. Me
gustaría cambiar eso…
De repente he sentido que tenía que hacerlo, de alguna
pequeña manera. Lo que he hecho ha sido escribir en la ventana la palabra
“felicidad”. Cuando he terminado de escribirla he mirado a mi alrededor y todo
seguía igual. Nadie se había dado cuenta.
Me gusta pasar desapercibida y realmente lo consigo, pero la
gente está empanadísima. Ha sido una chorrada enorme pero la intención era
genial, así que eso me tranquiliza. Al menos he intentado que alguien se ría de
mi, he intentado provocar una sonrisa de la forma más patética que se me ha
ocurrido y aunque no lo he conseguido me he sentido bien. Quizás alguien a
quien no haya visto ha sonreído al ver la tontería…
Cuando me he bajado del autobús de camino a casa se podía
ver la Luna en compañía de unas cuantas estrellas. Eso siempre me alegra. Me
gusta buscar las constelaciones y quedarme embobada mirando al cielo. De hecho
un día le puse nombre a una estrella porque sí, me gustó ese brillo anaranjado
que tenía y le llamé “Poética”. Tiene su explicación pero eso es otra historia…
He bajado de las nubes al llegar a casa y he disfrutado
viendo a mi familia. Mi hermana pequeña ha salido al pasillo a darme un abrazo.
Sé que me echa de menos aunque me lo demuestre poco, pero con cosas así me
alegra bastante los días. Le he dado su regalo de cumpleaños (mejor tarde que
nunca) mientras me contaba las notas que ha sacado y me enseñaba sus dibujos.
Realmente tiene talento dibujando y coloreando, creo que eso debería
mantenerlo.
Luego me ha contado que para un trabajo de tecnología tenía
que hacer un escenario en el que ha puesto como banda a Muse, mi grupo
favorito. Con éste tipo de cosas me da a entender que me echa de menos y eso me
alegra. Después de todo me quiere…
Todo esto junto a mi hermana mayor que se reía y de vez en
cuando le hacía rabiar. Todo con mucho cariño.
La noche ha transcurrido a base de conversaciones en el chat
con personas que no se sentían muy a gusto. Me he sentido bien al darme cuenta
de que la gente cuenta conmigo cuando tiene un problema y eso es lo que
necesito. Hacía tiempo que no me sentía capaz de ayudar a alguien cuando tiene
un problema y hoy en ese aspecto ha sido genial la sensación. Esa gente no sabe
que cuando cuentan conmigo me dan la vida…
Ultimamente me faltaba eso, sentirme útil. Yo quería
estudiar psicología porque ayudar a las personas hacía que me sintiera feliz.
Me gustaba ayudar a la gente con sus problemas. Me gustaba escucharles y que
cuando me dieran las gracias yo sintiera que también debía darlas, y así
ocurría.
Hacía tiempo que no me sentía capaz de proporcionar apoyo
emocional y hoy ha sido un día asi; de emocionarme y emocionar.
Os dejo con una canción que me ha enseñado una gran amiga durante el día y que creo que es perfecta para hoy.
Gracias a todas esas personas que se han cruzado en mi
camino dejando una pieza, componiendo así el puzle de mi vida.
Cada uno tiene su forma de sentir y de ver las cosas pero en el fondo creo que todos nos parecemos un poco. Lo que te quiero decir con esto es que, la gente también contaba conmigo para contarme sus problemas y la verdad es que me encantaba escuchar todos sus problemas y poder ayudarles un poquito. Además de que eso que ha vivido esa persona me puede ayudar también a mi en un futuro.
ResponderEliminarLos hermanos/primos/sobrinos, etc muchas veces son las pequeñas personitas que son capaz de poner "color" a un día oscuro y se agradece muchísimo.
Por otro lado si, la mayoría de las personas van serias y pocas se sienten de verdad felices... Yo también querría cambiar eso, pero creo que hiciste bien, a lo mejor luego se montó otra persona justo en tu mismo sitio, teniendo un día pésimo y leer ese mensaje diciendo: "Felicidad" pudo haberla alegrado mucho el día.
Con respecto a Muse, es grupo grandísimo, no es mi favorito pero si hay muchas canciones que me encantan.
Y poco más, espero que todos tus días sigan siendo así o mejor.
Cuídate desconocida e intenta ser un poco más feliz (si se puede)
Inesperado y grandioso. La felicidad es acompañante íntima en todos los días de mi vida y amiga constante en las dificultades. No sé si se podrá ser más feliz, soy feliz a mi manera y eso es lo importante. Es agradable que todos nos parezcamos un poco. Muchas gracias desconocido, por aportar un rayo de luz.
EliminarEspero que sigas causando pequeñas emociones al mundo.